Un año de Adiós a mis demonios

Normalmente no dispongo de conexión a internet los fines de semana, pero ahora he pedido unos minutos prestados para escribir estas líneas y sólo hacer mención de este hecho.

Es increible como pasa el tiempo, sin querer y menos pensarlo, este espacio pequeño en tamaño, pero grande para mi por muchas otras cosas, cumplió hoy hace unas horas un año de vida.

Esta última semana pensé mucho en lo que podría hacer o escribir hoy, muchas ideas, pero muy poco tiempo como para hacer un resumen, un balance, análisis de estadísticas o una lista de quienes pasaron por aquí. Talvez lo haga en otro momento, cuando disponga de unos minutos más.

Gracias a quienes me han acompañado en este año, a quienes pasaron de visita, a quienes comentaron, opinaron, criticaron, dejaron palabras de aliento, ofrecieron su amistad, o dejaron un saludos.

Si bien uno dice que escribe para uno mismo, sin importar quien pase por aquí y lea lo que uno deja en estas líneas, es justamente por ellos, quienes se dan un tiempo para pasar por aquí, que este lugar no queda flotando como una planta en el ciberespacio, este lugar ha cobrado vida, una vida más activa y dinámica, que ha hecho de este lugar algo muy especial, una parte más de mi.